Las metilaminas son sustancias químicas muy importantes, ya que se utilizan comúnmente como productos intermedios para una amplia gama de productos químicos agrícolas, nutrientes para animales, catalizadores, productos electrónicos, explosivos, aditivos para combustibles y tratamientos de gas y petróleo.

Se aplica un método sistemático para diseñar una planta sostenible y ambientalmente aceptable para producir monometilaminas, dimetilaminas y trimetilaminas a partir de metanol y amoníaco. El método sistemático divide el trabajo de diseño del proceso en 12 tareas secuenciales que cubren todas las etapas del diseño conceptual, desde la consideración de los aspectos cualitativos del diagrama de flujo del proceso y los cálculos preliminares hasta las simulaciones detalladas del proceso.